jueves, 24 de septiembre de 2009

METAMORFOSIS DEL TIEMPO

SEPTIEMBRE 24 Jueves


Con excelsa suavidad tibia el sol inunda una mañana expectante, abierta a un mar rumoroso movido por unas olas lentas y tranquilas, que llenan la playa de un apacible murmullo de blancas espumas. Los gorriones proclaman en su limpio idioma de sencilla alegría la grandeza inaudita de participar en este iluminado ahora. El firmamento rebosa de azul con plena exuberancia.

Un café y una torta de aceite son energías suficientes para iniciar sin demora mi cotidiana actividad andariega. El camino ya está pletórico de luz, recorrido a la carrera por los abundantes deportistas, dialogando con las pensativas sombras de las palmeras, abierto a un levante intangible y secreto que trae el fresco aliento del mar, húmedo aún de la reciente madrugada.

Hoy apetece la sombra, el sol no tiene apenas adversarios, ni una nube, escaso viento. Los bañistas se encuentran en su universo preferido.

Las gaviotas sobrevuelan los edificios en bandadas emitiendo blancos gemidos, entre todas graznando, dilatadas, profusas e incomprensibles quejas.

Entre una cosa y otra llega el mediodía, resuelto, ilimitado, de una inexplicable y esclarecida textura de tranquila sedosidad. Una vela latina a lo lejos con pausada calma navega.

Cuando llego al trabajo, comenzada la tarde, la ciudad está sumergida en un ebúrneo sueño de lenta reverberación detenida. A mi salida, el cielo estrena un azul nuevo, vivo, despierto. Andando por las calles, la mirada se pierde en la bóveda del abierto oceáno que el perfil de los edificios delimita.

La vegetación del parque descansa tranquila sobre los bancos, algunas palomas pasean o vuelan, mientras los mirlos hozan la tierra con sus amarillos picos, escondidos felices entre las plantas en sombras.

La tarde cede a la noche lentamente el completo espacio y la absoluta dimension del tiempo. El mar se viste de gris poco a poco oscureciéndose. Una media luna dichosa se asoma sobre los pescadores que han venido a verla.




© Acuario 2009

No hay comentarios:

Publicar un comentario