viernes, 22 de octubre de 2010

22/X/10 Revelado no es claro, oculto no es oscuro





Lenta expectación inmóvil extiende el tiempo
mientras sumida en tercos interrogantes y cerradas dudas
la noche se eleva como muralla de sombras.

Con una invocación en tu nombre
llamo a las abiertas puertas de la vida
confiando
te revelen las claves, el nimbado algoritmo
la secreta sabiduría de la oportunidad precisa
la voz, el espacio, la luz e inteligencia que te descubra
todos los ocluidos entresijos
y evitando vencer logres salir airosa,
deteniendo hábil en adecuación precisa
tus argumentos
para subyugar y convencer
más con tu decidido silencio
que con tu palabra.

Pues has de temer como al fuego
crezca bajo tus pies el orgullo en la réplica
la violenta fiereza frente a la sutilidad persuasiva.

Imploro para ti la intuición perfecta
que impulsada con firme suavidad por el filial amor
logre sortear los escollos
que la humana condición siempre plantea.

Confío en ti,
saber desconocer tu inteligencia es lo sublime,
un gran general no posee deseos de guerra
un gran guerrero no es violento
un gran conquistador no combate,
así siendo anguloso no hiere
siendo recto no es inoportuno
siendo resplandeciente no deslumbra.

Pues el sitio de lo débil y lo tierno está en lo alto
lo débil vence a lo fuerte
y lo flexible a lo duro.

Palabras verdaderas
aunque no lo parezcan.




© Acuario 2010

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